La Junta de Distrito de Villaverde, a través del área de Servicios Sociales, ha contado con Siete Estrellas – SocialMente para la ejecución de un proyecto dedicado a la intervención y el apoyo de menores y sus familias que se encuentran en situación de riesgo de exclusión social. Un proyecto en el que hemos comenzado a participar hace unos meses y del que vamos viendo sus frutos.
Tras una amplia experiencia en el desarrollo de programas vinculados a otros servicios de dinamización vecinal y de intervención socioeducativa para este distrito, desde este nuevo proyecto se ha planteado ir un paso más allá, y se ha priorizado la creación de un “espacio seguro” en el que las personas participantes —menores y sus familias— puedan desarrollarse y adquirir herramientas valiosas para su día a día.
Arantxa Cantarero, coordinadora de proyectos, explica que “la elección de trabajar directamente con ambos grupos responde a una necesidad detectada en el distrito de Villaverde: brindar un apoyo integral que ayude tanto a los y las jóvenes a enfrentarse a los retos sociales, educativos y emocionales del día a día como a sus familias para desarrollar competencias que faciliten una crianza positiva y saludable”.
De este modo, el proyecto permite construir colectivamente un espacio donde menores y sus familias sienten la confianza necesaria para expresarse y crecer. A partir de actividades de carácter lúdico y educativo, se busca que los y las participantes adquieran habilidades de aprendizaje y socialización, resolución de conflictos y el fortalecimiento de las relaciones familiares. Desde una perspectiva preventiva, se les asesora en temas de crianza positiva y se les anima a participar activamente en la vida y el desarrollo de sus hijos e hijas. De esta manera, se fortalece la cohesión y la comunicación dentro de las familias, promoviendo un ambiente más armonioso. En paralelo, “el equipo de Siete Estrellas – SocialMente trabaja para que las familias conozcan mejor el entorno de su distrito y los recursos disponibles que pueden serles de ayuda en su vida cotidiana”, comenta Cantarero.
Un enfoque integral y comunitario
Este proyecto tiene como misión generar un impacto duradero tanto en la vida de los menores como en la de sus familias, utilizando una metodología que integra tanto el aprendizaje como la diversión y el ocio. Y para aplicar esta metodología hemos implementado un enfoque basado en la educación no formal, que permite a las personas participantes aprender de manera práctica y cercana. En concreto, el programa de actividades de este proyecto está estructurado en tres modalidades: intervenciones individuales, grupales y comunitarias.
- Actividades individuales: Las sesiones individuales están diseñadas para responder a las necesidades específicas de cada menor y/o familia. Estas sesiones permiten trabajar de manera personalizada en los retos que cada uno enfrenta, ya sea en el ámbito emocional, social o educativo. Las intervenciones pueden abordar temas como la gestión emocional, la autoestima y la adaptación social.
- Actividades grupales: En estas actividades, los y las menores participan en dinámicas y juegos que fomentan la interacción, el trabajo en equipo y el respeto mutuo. Además, se realizan salidas que incluyen actividades de fin de semana y, una vez al año, un campamento con pernocta. Estas experiencias no solo les permiten convivir y aprender de sus compañeros, sino también explorar nuevos entornos y desarrollar su autonomía.
- Actividades comunitarias: El proyecto también tiene una fuerte vinculación con la comunidad de Villaverde. Participamos en actividades y eventos organizados en el distrito, lo que permite a los y las menores y sus familias la interacción con otros recursos y colectivos de su entorno. Estas experiencias fortalecen su sentido de pertenencia y les ayudan a construir una red de apoyo en la comunidad.
Desde una perspectiva social, este proyecto no solo beneficia a los y las implicadas directamente, sino también al propio distrito de Villaverde en su conjunto. Al empoderar a los menores y brindar un soporte a las familias, se están creando las bases para una comunidad más cohesionada y resiliente. A través de la intervención en las familias y la colaboración con otros recursos del distrito, el proyecto contribuye a mejorar el bienestar social en la comunidad y a fomentar una convivencia positiva.
Nos hace muy felices ver cómo avanzamos en este proyecto, pues entendemos que ampliar el foco de la iniciativa para integrar tanto a los y las menores como a sus familias enriquece la iniciativa, al tiempo que se promueve un Villaverde más unido y solidario.